de Miguel Ramos
…..Ser de los primeros de la fila no ayudaba mucho, seguro lo digo por la estatura…..había grandulones que nos quitaban el sándwich y lo único que quedaba era un suspiro y puchero de llanto, sin defensa, no faltaban los apodos , el que te agarraba de encargo, el que provocaba que no quisieras pasar por determinado lugar con tal de no encontrártelo. A los 6 o 7 años esto no es muy gratificante , ni estimulante, es aterrador!!!!. La mochila de cuero, de moda en nuestros tiempos no ayudaba mucho a estar alerta, y se era presa fácil de los empellones que nos mandaban directamente a barrernos en segunda base o a tirarnos una facial de voleibol con loza de pípila incluida, que decir de las famosas peras, se daba mucha ventaja cuando te la tiraban hacia arriba, ¡Cuando la ibas a alcanzar!!!!!!!, Carlos Meléndez le daba con todo, me pregunto si la pera le había hecho algo porque solo me acuerdo que se reía y se reía y enrollaba con una fuerza descomunal la pera en el tubo. No había hermanos mayores que me defendieran, así que la timidez se hizo parte de las materias cursadas cada año, un poco más intensas en algunos, un poco más ligeras en otros. El exponer en clase era difícil , duro, el temor a la crítica, a la burla, el competir con grandes talentos que se formaron junto con nosotros, con igual cinco dedos en cada mano dos piernas, una cabeza pero así de similares así de inalcanzables, el tener tanto que decir y no poder hacerlo, no por no tener libertad simple, por no saber hacerlo y por no atreverse.
A veces estático totalmente con un terror increíble a moverse del lugar donde se quedaba petrificado por ser en momentos invisible, pero las gradas, la vista al cerro o al campo de la Tola regándose, aliviaban esos pequeños desazones con los que se lidiaba de vez en cuando, a veces más a veces menos. Después, creciendo esperando un chance a la sombra de los que siempre sacaban medallas, de los que siempre acaparaban la atención del respetable, de los populares, de los que acaparaban a las niñas y después a la señoritas, de los que parecía que habían comprado su seguridad por tonelada pero no daban la dirección para adquirirla, si, de ellos…..de los Lados A…..
Correr la bola en el fullback se convirtió en un lenguaje, estamparte con un Linebacker del doble de tu peso y tamaño hacían el reto más fuerte, más entrañable, más temeroso, conducir el balón, hacer un gol te liberaba , te hacía fuerte, volabas…..
Los términos derivaron en la denominación de los tipos de canciones convencionalmente ubicados en cada lado del disco, siendo el lado A la canción principal, aquella que el productor del disco pretende que obtenga rotación en las estaciones de radio y con el tiempo se convierta en hit, y lado B a la canción secundaria que no suele aparecer en el álbum y que sirve como material inédito para promocionar la venta del sencillo. Pocas veces un lado b visto es, a menos de ser un trancazo, pero cuantos lados b dormidos tienen que dar cosas al mundo?, cuantos?…..miles!!!!!.....lo bueno de hoy es que los discos solo tienen un lado y en él, todos participamos….. gracias Querida Tola por un silencio que permitió observar lo que hoy se vive con gran pasión…..la vida!!!!!
